Llevas muchos años siendo tú, con ideas en la cabeza, con pensamientos fijos, con valores integrados. Con virtudes y defectos, con buenas y malas experiencias. Tienes dentro de ti, historias, recuerdos, aprendizajes y lecciones aprendidas.

Seguro que sabes cuáles son tus defectos, los tienes presentes porque hace años que tus padres te los dicen, de ellos tus hermanas o hermanos se quejan, tus amigos te los indican, tus parejas te los recuerdan y tus jefes los sacan a relucir en los peores momentos.

Vivimos en una época donde reconocer las virtudes de los otros simplemente no ocurre. ¿Cuándo fue la última vez que le reconociste y le dijiste un aspecto positivo a alguien? No estamos acostumbrados a esto. Incluso si ahora alguien llegará y dijera algo bueno de ti, te parecería raro o creerías que hay una segunda  intención detrás.

Por eso cuando en una entrevista te preguntan ¿Por qué hemos de escogerte a ti? ¿Qué aportarás a nuestra organización? ¿Por qué tú? En tu cabeza resuena el silencio más tenso conocido. La gente tiende a la crítica fácil, pero saber donde uno destaca no es arrogancia.

Llevas mucho tiempo sin mirar hacia dentro, sin poner en valor tus conocimientos, habilidades o experiencias y todo esto tienes que tenerlo muy claro en una entrevista. La persona enfrente de ti no sabrá nada que tú y tu CV no le expliquéis.

Tienes que hacer uso del Autoconocimiento, es decir, un auténtico estudio detallado sobre qué tipo de profesional eres. Y detectar aquellos puntos fuertes que crees que te convierten en alguien valioso para la organización.

Convierte esa nueva información en la herramienta que te abra todas las puertas. Busca dentro de ti, no tengas miedo de lo que  puedas encontrar. Eres tu publicista, y como tal tienes que conocer el producto a vender.

Nunca lo habías hecho antes, es normal que te cueste. En ese punto busca soporte en profesionales, infórmate como ahondar dentro de ti, busca como hacerlo, hay expertos, gente que ha hecho este proceso antes que tú.  Déjate guiar.

Te puede parecer una tarea titánica, en ti mismo encontrarás muchas resistencias enquistadas, pero como dijo Nelson Mandela “Era imposible hasta que alguien lo hizo”.

Hoy en día al proceso de selección se le llama Talent Acquisition, si en inglés, por que el concepto viene del mundo anglosajón donde APORTAR es básico. Todos tenemos nuestros defectos, nadie es perfecto, pero del mismo modo todos somos muy buenos haciendo algo, tenemos un talento.

Y de eso trata esa idea, las empresas buscan atrapar ese talento, pero has de conocer el tuyo. Quizás no es una sola fortaleza bien diferenciada si no un conjunto de conductas y conocimientos que una vez en acción, te hacen valioso.

Para saber cuáles son tus puntos fuertes hay ejercicios como el siguiente, y puedes encontrar más además de otras reflexiones en la guía Objetivo: tu Empleo de ICSA Grupo®.

¿Qué sabes o conoces?                                       CONOCIMIENTOS

¿Qué sabes hacer?                                               HABILIDADES

¿Qué puedes hacer?                                            APTITUDES

¿Qué quieres hacer?                                            ACTITUDES

Tienes talento y no lo sabías. Hasta ahora.